El acto de entrega tendrá lugar hoy, en el transcurso de la gala inaugural del festival, en el escenario principal del Teatro Arriaga, a partir de las 20:00 horas.
El acto de esta tarde incluye además la proyección de los cortometrajes vascos a concurso y, con la colaboración de la Filmoteca Vasca, se presentará Puerto Bilbao (1923), desconocido documento en imágenes sobre un capítulo de la historia de Bilbao.
El Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao (ZINEBI), –organizado por el Ayuntamiento de Bilbao–, arrancará esta tarde con un homenaje al compositor donostiarra Alberto Iglesias, que recibirá el Mikeldi de Honor del festival en reconocimiento a la obra entera de un músico, que ha sido capaz, con su talento para potenciar el sentido dramático de las imágenes en movimiento, de poner la intensidad emocional de sus partituras al servicio de algunos de los grandes directores del cine de hoy. El acto de entrega tendrá lugar en el transcurso de la gala inaugural del festival, a partir de las 20:00 horas, en el Teatro Arriaga.
Alberto Iglesias (San Sebastián, 1955) es uno de los grandes compositores de música del cine contemporáneo nacional e internacional. Poseedor de una extraordinaria formación musical que incluye estudios de piano, composición, contrapunto y música electrónica, Alberto Iglesias dio sus primeros pasos en el arte de poner música a las películas con los cortometrajes “Paisaje” e “Ikusmena”, ambos dirigidos por Montxo Armendáriz en 1980. Poco tiempo después, debutó en el largometraje con “La muerte de Mikel” (Imanol Uribe, 1984), la película más representativa de lo que por entonces la crítica empezó a llamar nuevo cine vasco.
A partir de principios de los 90 Alberto Iglesias emprende y desarrolla su colaboración, más o menos continuada, con algunos de los más importantes directores del cine estatal, tales como Ricardo Franco (“El sueño de Tánger”, 1991), Julio Medem (“Vacas”, 1992), Carlos Saura (“¡Dispara!”, 1993), Pedro Almodóvar (“La flor de mi secreto”, 1995), Bigas Luna (“La camarera del Titanic”, 1997), Iciar Bollain (“Te doy mis ojos”, 2003) e Isabel Coixet (Spain in a Day, 2016). En todo caso, sus partituras para Medem (5) y Almodóvar (10) las que señalan sus más intensas, duraderas y personalísimas aportaciones al reconocimiento mundial del cine español.
En el plano internacional destacan sus composiciones para Oliver Stone (“Comandante”, 2003), Fernando Meirelles (“El jardinero fiel”, 2005), Marc Foster (“Cometas en el cielo”, 2007), Steven Soderbergh (“Che: Guerrilla·, 2008), Hossein Amini (“Las dos caras de enero”, 2014) o Ridley Scott (“Exodus: Dioses y reyes”, 2014).
Su prolífica producción musical para el cine la acreditan 10 premios Goya, entre ellos los otorgados en 2010 por “Los abrazos rotos”, de Pedro Almodóvar; en 2011 por “También la lluvia”, de Iciar Bollain, y en 2012 por “La piel que habito”, otra vez de Almodóvar. Desde el punto de vista internacional, en 2005 Alberto Iglesias fue el primer compositor español candidato al Oscar, en la categoría de Mejor Banda Sonora Original, por su partitura para “El jardinero fiel”, de Fernando Meirelles, por la que obtuvo además una candidatura a los premios BAFTA y el Premio a la Mejor Banda Sonora Original de los World Soundtrack Awards. En 2008, por su composición para “Cometas en el cielo”, de Marc Foster, fue de nuevo candidato al Oscar, recibió el Satellite Award 2007 y fue candidato a los premios BAFTA y a los Globos de Oro. En 2011 fue premiado con el Hollywood Film Composer Award por sus bandas sonoras para “El topo”, de Tomas Alfredson, –por la que también logró su tercera candidatura al Oscar en 2012, una nueva candidatura a los BAFTA y el premio al Mejor Compositor Europeo–, y “La piel que habito”, de Almodóvar.
Sus últimos proyectos han ido de la mano nuevamente de Julio Medem (“Ma ma”, 2015), Pedro Almodóvar (“Julieta”, 2016) y Santiago Mitre, para quien ha puesto banda sonora a “La Cordillera” (2017) protagonizada por Ricardo Darín, y que se estrenará en cines de todo el Estado el próximo 29 de septiembre.
Alberto Iglesias también ha hecho algunas incursiones en la música para ballet, entre las que destacan sus colaboraciones con el coreógrafo Nacho Duato y su Compañía Nacional de Danza, para la que ha compuesto y producido las piezas “Cautiva”, “Tabulae”, “Cero sobre cero” y “Self”.
CORTOS VASCOS
Como ya viene siendo habitual en las últimas ediciones del festival, esta sesión inaugural incluirá además la proyección de los cortometrajes vascos a concurso dentro de la Sección Oficial, y que son los siguientes: Plágan, de Koldo Almandoz (documental), Una sinfonía en silencio (Cicha Symfonia), de Aitor Gametxo (documental), Lo-ibiltariak, de Iñigo Salaberria (documental), Areka, de Begoña Vicario (animación), Aprieta, pero raramente ahoga, de David Pérez Sañudo (ficción) y Zacarías, de Violeta Trincado (ficción).
Por otro lado, con la colaboración de la Filmoteca Vasca-Euskadiko Filmategia y en línea con el compromiso del festival de apoyar y promover la recuperación y divulgación de nuestro patrimonio cinematográfico, ZINEBI 59 presentará en su gala inaugural Puerto Bilbao, interesante y casi desconocido documento en imágenes sobre un capítulo trascendental de la historia de Bilbao.
Producido en 1925 por encargo de la Junta de Obras del Puerto, el origen de este cortometraje de la época del cine mudo estuvo en el deseo de la Autoridad Portuaria de entonces, de registrar en celuloide un gran temporal que por entonces azotó el litoral vasco. La filmación fue atribuida (no ha podido ser confirmada) a los realizadores Pedro González Blanco y Joaquín Soler e incluye imágenes bilbaínas de enorme valor documental.
